Mi vecino.. |
Llegué
a París el miércoles 4 de febrero. El avión aterrizó a las 8:43 am y tardé un
poco menos de una hora antes de que yo estuviera saliendo de las puertas corredizas
de vidrio y me dirigiera a un taxi ..
Era un
día nublado de invierno ordinariamente gris. Pero a mi parecer el día estaba
lleno de entusiasmo deslumbrante, después de todo era mi PRIMER día en París!
Llegué
a mi casa a eso de las 11:00 am. Me encontré con la guardián del edificio.
Luego, subiendo las escaleras hasta mi apartamento en el sexto piso resultó ser
una aventura. Ya que no hay ascensor y digamos que tuve subir equipaje que
equivale a la estadía de la mitad de un año!
Una vez
que llegué a la cima y me acomodé, inspeccioné el lugar, lo que no requirió de
mucho tiempo ya que el apartamento mide 20m2! Yo sabía que si quería
vencer el desfase de horario, yo debía mantenerme ocupada y quedarme despierta.
Así que, empecé a desempacar.
Pronto
me di cuenta que no requería mucho tiempo para desempaquetar 2.5 maletas más
algunas bolsas más pequeñas, y como a las 5:00 pm sentí unas ganas insuperable de
tomar una siesta! Yo quería reconciliar mi cansancio con el sueño ya que yo no fui
capaz de dormir durante todo el vuelo nocturno.
Me
desperté a las 8:00 pm con el estómago gruñendo ferozmente porque yo no había digerido
un almuerzo desde las últimas 12 horas! Me decidí a localizar el supermercado
más cercano y comprar algunos alimentos básicos después de tomar algo de tiempo
para actualizar a mi familia en los Estados Unidos. Después de que terminé de
revivir el día con la familia, descendí a las calles desconocidas.
Después
de retroceder mis pasos desde el supermercado, llegué a mi edificio a eso de 9:10
pm, con dos bolsas de comida. Logre usar el código de entrada y con éxito abrió
la primera puerta. Esto me llegó hasta el vestíbulo. Después, llegué a la
segunda puerta, pero para mi sorpresa, estaba cerrada con llave.
Busque
en mi cartera y saqué el llavero que la guardián me había entregado en la
mañana. Tenia 1 llave maestra la cual no encajaba en la cerradura. Como no
tenía ni idea de cómo abrir la puerta, estaba atrapada sin ninguna forma de
poder pasar.
De
repente me di cuenta de que estaba sola en una ciudad extraña! No tenía a nadie
a quien llamar y ni idea de a dónde ir. Yo estuve esperando en el vestíbulo
durante 35 minutos, lo cual me pareció toda la vida! En ese momento sentía que me
estaba muriendo de hambre, porque yo no me había decidido por algo de comer debido
a mi indecisión abrumadora.
A eso
de las 9:45 pm, recurrí a orar que alguien entrara o saliera del edificio. Yo pensaba
que estaba realmente orando por un milagro! En mi imaginación, yo ya me veía
pasar mi primera noche en París en el vestíbulo de mi nueva residencia! Por lo
que yo suponía que era miércoles y la gente iría a trabajar y los niños irían a
la escuela al próximo día y no tenían nada que hacer fuera alrededor de esa hora
de la noche.
Mis
oraciones fueron finalmente respondidas cuando a eso de 9:47 pm sale un chico
alto y desconocido. No paso mas de un segundo antes de que yo preguntaría cortésmente,
pero con desesperación –Disculpa, ¿cómo puedo abrir la puerta ..
Para mi
sorpresa su respuesta fue –Tu debes ser la nueva americana. Le dije a la
guardián del edificio que me dejara saber si tu necesitabas ayuda con cualquier
cosa...
Cada
vez que pienso en ese primer día que conocí a mi vecino le agradezco a Dios
repetidamente porque sabía exactamente el tipo de amigo que necesitaba mientras
yo viviera en París. El tipo de amigo que..
![]() |
Mi vecino y yo.. La fiesta de despedida real! |
.. me
enseñe a abrir la puerta, que cenara conmigo en mi primera noche en París
cuando yo necesitaba desesperadamente compañía, que se levantara temprano y me escoltara
al trabajo en mi primer día, que me enseñara francés, que me acompañara a la
estación de metro más de una y otra y otra y otra vez, que me escuchara quejarme...
(ya sabes), que confiara en mí para escuchar sus ideas de negocio, que me ayudara
a decorar mi apartamento, que arreglara cosas, que me prestara algunas cosas
cosas, que me ayudara a cargar mis compras, que mirara la televisión conmigo, que
subiera seis pisos cuando logre olvidar las taquillas de la fiesta.. gracias..